Reseña: The Wretched

Director: Brett Pierce y Drew T. Pierce
Guion: Brett Pierce y Drew T. Pierce
Año: 2020

IFC Films se ha ganado un lugar especial entre los fanáticos del cine de horror por las buenas producciones que constantemente pone a nuestra disposición. Películas como “The Wind”, “I Trapped The Devil” o “Swallow” son algunos de los ejemplos recientes que apoyan este argumento, aunque también esté detrás de otras películas menos agraciadas como “The Other Lamb”. Algo que caracteriza a esta casa productora es la atmósfera de sus películas, algo que comparte con la casa productora A24.

Ben es un joven adolescente que se va a vivir con su padre luego de estar un tiempo distanciados. El divorcio de sus padres le ha ocasionado problemas de conducta, lo que lleva a que nadie confíe en él cuando comienza a sospechar de las acciones de su vecina. Luego de monitorearla por un tiempo, Ben llega a la conclusión de que su vecina es una antigua bruja que se alimenta de niños.

La escena inicial de “The Wretched” pone al espectador en perspectiva sobre lo que es esta bruja y expone sus mejores atributos, aunque esta escena no tiene mucha importancia con la trama y el exponer de forma temprana a la bruja perjudica el suspenso. Sin embargo, esta escena sirve para exponer otros atributos, como los geniales efectos especiales, en su mayoría prácticos, la atmósfera y la selección musical y composición original. También se logra presentar muchas de las características de la bruja y el mito alrededor de ella en solo unos segundos de rodaje.

De esta escena saltamos 35 años hacia el futuro hasta aterrizar en lo que debe ser el tiempo actual y conocemos al protagonista Ben, interpretado por John-Paul Howard (“Midnight Texas”). Existen personajes que pueden hacer o romper una película, y el personaje de Ben y cómo se desarrolla es de esos que deteriora significativamente la calidad de la película. Por suerte, “The Wretched” tiene otras muchas buenas cualidades que la mantienen a flote y la hacen una experiencia agradable.

Las actuaciones no están ni cerca de figurar entre sus cualidades positivas, pero el problema principal de los personajes proviene de cómo se trabajan en el guion de los también directores Brett Pierce y Drew T. Pierce (“Dead Heads”). En particular el personaje de Ben, a quien seguimos a través de la mayoría de la película, se presenta como uno detestable y que se hace difícil interesarse por él. Sobre esto las escenas en las que esta mala cualidad se resalta son escenas innecesarias que podrían eliminarse sin ningún efecto en la trama y que perjudican grandemente al personaje protagonista.

Hasta el momento puede sonar como si no hubiese disfrutado de la película, pero nada más lejos de la realidad. “The Wretched” crea una atmósfera incómoda y desarrolla una historia interesante desde el comienzo y que va preparando el camino para un tercer acto donde se luce con los efectos especiales y un giro completamente inesperado. El mito alrededor de la bruja, sus características y su diseño son espectaculares y logran enviar escalofríos a través de la espalda de hasta los más valientes.

“The Wretched” fue anticipada con bombos y platillos, pero, que cuando es una buena película de horror, se queda corta de llegar a ese nivel de clásico contemporáneo con el que se ha mercadeado. Es difícil interesarse por los personajes principales, la edición por parte es errática e incoherente y tiene varias escenas que sobran, pero el misterio alrededor de la bruja, los efectos especiales y como se desarrolla e interpreta se sobrepone a todos estos problemas. La película crea una buena atmósfera desde el comienzo y tiene un carácter bien definido y mucho potencial, pero siempre se siente como que le falta algo para rebasar el límite de solo ser una buena película de horror.