Reseña: Halloween Kills

Director: David Gordon Green

Guion: Scott Teems

Año: 2021

“Halloween Kills” es una de muchas películas de las cuales nos vimos privados de disfrutar el año pasado gracias a la pandemia y al cierre de locales donde se acumulan muchas personas. Un año más tarde “Halloween Kills” ve la luz, aunque no con la fanfarria que pensaba, ya que aún estamos en medio de la pandemia y la asistencia a los cines continua muy reducida comparada a años anteriores, pero con la ventaja de poder aprovechar la nueva tendencia de estrenar películas de forma dual en cines y plataformas de streaming. 

“Halloween Kills” comienza exactamente donde terminó “Halloween” (2018). En la noche de Halloween, 40 años después, Michael Myers está de vuelta en el pueblo de Haddonfield nuevamente dejando cuerpos en su camino. Lauri Strode y su familia continúan intentando ponerle fin a su maldad.

Si en “Halloween” (2018) el enfoque recae en el hecho de que la película tiene lugar 40 años después de los sucesos de su antecesora, “Halloween Kills” pone el énfasis en la figura de Michael Myers como el hombre del saco. Mientras que en la película anterior la mayoría del tiempo se dedica a explorar el personaje de Laurie Strode y el efecto que tuvo Michael Myers en ella aun luego de que pasaron tantas décadas, en este caso se explora el personaje de Michael y el efecto que continúa teniendo en el tranquilo pueblo de Haddonfield. 

En este mismo esfuerzo, el director David Gordon Green y el guionista Scott Teems ("Rectify”) llevan la historia de esta nueva entrega por un camino más predecible y que se ajusta mejor a las normas de un slasher. Básicamente tenemos a Michael matando a todo el que se le aparezca en frente de las formas más morbosas posibles y la historia solo consigue progresar un poco. Encima, el papel de Laurie Strode parece secundario y por partes hasta te olvidas de ella, cuando fue el rol más importante de la anterior. 

“Halloween Kills” más que progresar en la historia, busca ser la entrada en la que Michael aumenta el número de víctimas y se ponen los efectos prácticos en el escaparate. Salvo por algunas partes que sirven para rellenar huecos en la historia entre las dos películas anteriores y esta (1978, 2018), me atrevo a pensar que puedes saltarte de “Halloween” (2018) a “Halloween Ends” sin que pierdas el hilo de la trama. En lo que a entretenimiento, gore y efectos especiales se refiere, la experiencia es excepcional.

“Halloween Kills” se toma muy en serio en ser la segunda parte de la trilogía y funciona como el segundo acto de una historia. La trama no progresa mucho desde donde la dejamos en la anterior hasta el final de esta, pero logra mantener al espectador enganchado en lo que propone por medio de fuerza bruta, traducido a violencia, gore y efectos especiales. Ya que cumplieron con su cuenta de víctimas particular, un número importante dentro de los slashers, esperemos que “Halloween Ends” sea una satisfactoria conclusión a la historia.