Reseña: Ghost Lab

Director: Paween Purijitpanya

Guion: Vasudhorn Piyaromna, Paween Purijitpanya, and Tossanphon Riantong

Año: 2021

Wee y Gla son dos doctores en un hospital con una estrecha amistad. Una noche, ambos experimentan un suceso paranormal que los lleva a cuestionarse la existencia de los fantasmas. Ambos doctores elaboran un experimento para probar la existencia de los fantasmas, pero ambos se obsesionan peligrosamente con el estudio.

“Ghost Lab” comienza con buen pie y promete ser una buena película de fantasmas. El evento que lleva a los amigos doctores Wee y Gla a establecer su experimento es una aterradora escena de fantasmas con buenos efectos especiales y un efectivo jump scare. Una gran escena que eleva las expectativas de los fanáticos del género.

Luego de esto, la película toma un tono más relajado, enfocado en la amistad de los doctores y en el experimento que ambos desarrollan. El tono se mueve de una película de fantasmas a una de investigaciones paranormales, que, aunque aún efectiva, comienza a exhibir algunos de los problemas en su guion. Pero no es hasta alrededor de la mitad de la película donde estos problemas se hacen tan presentes que le afectan.

Alrededor de la mitad de la película ocurre un evento completamente inesperado que cambia el rumbo de la trama. Aunque inesperado, el evento no tiene sentido en lo absoluto. No entraré en detalles para no arruinar la sorpresa, pero la decisión que se toma en ese evento no va en acorde con cómo se ha desarrollado la historia ni lo que hemos visto de los personajes. De ahí se destapa el problema de las decisiones incoherentes que se extienden hasta la resolución final.

Luego del evento que cambia el rumbo de la trama, la película pasa de ser una de investigación paranormal a ser un drama de suspenso, donde domina más el drama que el suspenso. El horror que presenta en el comienzo no es más que un coqueteo con el género, pero que nunca puede retomar y va de más a menos demasiado rápido. Lo mismo ocurre con la historia, que presenta una idea sumamente interesante, pero toma una ruta que no le favorece y la deja subutilizada.

“Ghost Lab” presenta una historia innovadora y un comienzo muy prometedor, pero se desinfla rápidamente por las malas decisiones en su guion. Presenta unas prometedoras escenas de horror que hacen salivar a los fanáticos del género, pero no es más que un espejismo que pronto se difumina en un drama paranormal, con énfasis en el drama. Las actuaciones, los efectos especiales y la música de fondo están muy bien, pero las incoherencias de su guion opacan el resto.