Reseña: Beasts Clawing at Straws

Director: Kim Yong-Hoon

Guion: Kim Yong-Hoon

Año: 2020

Una bolsa Louis Vuitton captura casi la totalidad de la escena de apertura, como si se tratara de un personaje más hasta que poco a poco vemos que está siendo transportada y almacenada en un casillero. Esta no es la última vez que veremos la bolsa y su estatus de pseudo personaje se continúa reforzando a través de la película, ya que alrededor de ella toma lugar la trama. Un empleado de una sauna, un oficial de aduana, una mujer estafada y una dueña de un spa, todos pondrán sus manos en la bolsa, pero ¿hasta dónde están dispuestos a llegar por el dinero que contiene?

“Beasts Clawing at Straws” es el impresionante debut del director Kim Yong-Hoon, donde escoge la avaricia como el punto focal de su trama. Durante el desarrollo de la película se contrastan las acciones que están dispuestos a hacer los personajes por dinero, todos en distintas situaciones económicas. La avaricia en distintas estratas sociales es indudablemente el tema y la crítica social que expone de forma magistral el novato director.

El excelente guion desarrolla varias historias de forma paralela que parecen no guardar ningún tipo de relación entre sí, pero a medida que se va revelando información se van atando más y más. Aun cuando resulta difícil identificar hacia dónde se mueve la historia, la capacidad de narración de Kim Yong-Hoon hace imposible el que puedas despegar los ojos de la película. Cada escena hace todo cada vez más confuso, pero proporcionalmente interesante, hasta que llega un punto donde toma varios giros y ponen todo en perspectiva y logra hacer perfecto sentido.

Por la naturaleza de la historia, se introducen bastantes personajes a la trama. Sin embargo, todos están tan bien desarrollados que sentimos que llegamos a conocerlos lo suficientemente bien como para entender sus acciones, aun las que son inesperadas. El excelente trabajo en actuación del elenco protagonista, compuesto por Jung Woo-Sung (“The Good The Bad and the Weird”), Bae, Sung-Woo (“The King”) y Jeon Do-Yeon (“The Shameless”), es esencial en hacer esto posible. De igual forma, el trabajo técnico en cinematografía y sonido sirve para elevar todo lo que se presenta en la trama.

La película no está escasa de metáforas directas e indirectas. Los nombres de algunos personajes y las imágenes, como el tatuaje de un tiburón para exponer el estatus de depredador alfa, son algunas de las más claras, pero no las únicas que se presentan. El director y escritor se las ingenia para incluir temas sobre el abuso contra las mujeres e inmigrantes en la sociedad sin sobrecargar la trama ni desenfocar lo que es su mensaje central.

“Beasts Clawing at Straws” es el impresionante debut del director coreano Kim Yong-Hoon que tiene todo a favor para catapultar su carrera hacia el éxito. La película es un excelente ejercicio de narración y desarrollo de personajes, con una trama tan enrevesada como fascinante. No es la película más original y se puede sentir algo lenta para los que busquen algo con más acción y gore, pero sin dudas es una excelente película de crimen y suspenso, lista para conseguir varios reconocimientos.