Reseña: Society

Director: Brian Yuzna

Guion: Rick Fry y Woody Keith

Año: 1989

“Society” se ha convertido en una película de horror con un masivo seguimiento principalmente por sus escenas de horror corporal. Imágenes de cuerpos torcidos y cabezas en traseros han despertado el interés de los amantes de lo bizarro y “Society” tienen mucho que ofrecer en este aspecto. 

Billy es un joven que es parte de una familia de la alta esfera de la sociedad. Sin embargo, Billy no se siente como parte de ese grupo social y hasta se siente diferente a su hermana y sus padres, quienes sí disfrutan de este estilo de vida. Poco a poco comienza a notar un comportamiento extraño de su familia y sus allegados que culmina en una sorprendente revelación sobre lo que está detrás del estilo de vida de las personas en las posiciones sociales más elevadas.

Si hay algo por lo que las personas recuerden a “Society” aparte de su contenido de horror corporal, es por su constante crítica social sobre el clasismo socioeconómico. Es difícil que la crítica social en el guion de Rick Fry (“Bride of the Re-Animator”) y Woody Keith (“Dementia”) dirigido por Brian Yuzna (“The Dentist”) pase desapercibido ya que lo tiran a la cara del espectador en innumerables ocasiones de la forma menos sutil posible. Frases repetidas constantemente como harás una gran contribución a la sociedad o representar literalmente como los ricos chupan la vida de los pobres no es fácil de malinterpretar.

Lo explícito del guion con su comentario social se iguala con lo explícito del horror corporal, lo que es el mejor atributo de esta película. Desde bastante temprano se introducen destellos del horror corporal, principalmente en la forma de cuerpos en posiciones humanamente imposibles, como Billy viendo a su hermana en la ducha con los senos y el trasero en la misma dirección, al igual que las constantes referencias a las babosas. Esto es solo el preámbulo de la locura de efectos especiales que se desatan en el tramo final donde el horror corporal toma el centro para dejar al espectador boquiabierto sin olvidar incluir la crítica social y las referencias sexuales con la misma falta de sutileza. 

Las impresionantes escenas de horror corporal y una historia interesante no son suficientes para ocultar las enormes carencias del guion. Demasiadas acciones de los personajes no tienen sentido y en ocasiones van en contra de la personalidad establecida en escenas previas, al igual que se incluyen personajes que nada aportan a la historia (como ejemplo está la madre de Clarissa). La calidad de las escenas de horror corporal presentadas en el tramo final de la película se opone a la calidad del guion, donde se presentan los más sustanciales errores en la toma de decisiones de los personajes y solo se enfocan en mover la historia entre escenas perturbadoras. 

“Society” no es una gran película en lo que a historia se refiere, pero si vale la pena ver por sus excelentes imágenes de horror corporal. El guion sufre de muchas fallas y agujeros aparte de ser demasiado burdo en su mensaje de crítica al clasismo socioeconómico y un final que deja tantos cabos sueltos como su desarrollo. Si se ignoran sus problemas, “Society” ofrece muchos momentos impresionantes sobre todo si es la primera vez que la vez.