Reseña: Apparition

Director: Waymon Boone

Guion: Mark S. Allen, Waymon Boone, Howard Burd y Rob Rose

Año: 2019

Con los avances en la tecnología de dispositivos móviles en la pasada década, estos aparatos se han vuelto imprescindibles en la vida de muchas personas. Para estos dispositivos cada vez hay más aplicaciones disponibles, pero ¿qué tal una que permita comunicarte con los muertos? Esta es la aterradora premisa que "Apparition" desaprovecha con una pobre ejecución.

Un ingenioso joven crea una aplicación para dispositivos móviles inteligentes que permite contactar con los muertos. Junto a un grupo de amigos, deciden poner a prueba la aplicación, la cual los lleva a una abandonada facilidad de corrección juvenil. Los vínculos que todos ellos tienen con ese lugar son revelados mientras se enfrentan a fantasmas del pasado.

El primer tercio de la película se dedica a exponer lo que vivió un niño luego de que fuese enviado a una facilidad de corrección juvenil luego de que su madre adicta a las pastillas accidentalmente muriera mientras lo atacaba. Esta es la parte más intrigante de la película, donde se ve como un niño sufre de exceso de autoridad y violencia en la facilidad correctiva y se desenvuelve como un drama juvenil. Luego de pasar bastante tiempo en esta historia, se lanza de repente unos años en el futuro y con un grupo de protagonistas distintos, que son los responsables del resto de la película.

La asociación de los nuevos personajes con los eventos previos es evidente desde que son introducidos, pero hay muy poca historia de trasfondo para entender las relaciones y reacciones entre el grupo de amigos. El elenco, protagonizado por Mena Suvari (“American Horror Story”), Kevin Pollak (“End of Days”) y Megan West (“How To Get Away With Murder”), en general hace un trabajo decente en interpretar a unos personajes con poca personalidad e interés, de esos personajes genéricos de los que nunca recuerdas su nombre. Otra parte del elenco hace un trabajo vergonzoso en las interpretaciones, sin entender el cómo llevar un cierto personaje.

Es sorprendente que esta película contara con cuatro escritores, Waymon Boone (“The Devil’s in the Details”), Mark S. Allen, Howard Burd y Rob Rose (“Stretch”), y aun así sufra de problemas de estructura, elaboración de personajes y diálogos. La trama de la película una vez se presenta a esta otra parte de la historia, gira alrededor de una aplicación que permite contactar a los muertos, creada por uno de los integrantes del grupo de amigo. Prácticamente no se dedica tiempo a explicar cómo él logra crear esta aplicación y cómo logra hacer este contacto, que es lo que pudo haber sido lo más interesante de la película, y simplemente la información es lanzada al espectador y continúa como si fuera algo normal. 

Como es de esperar, el grupo de amigos decide probar la aplicación, lo que los lleva a la facilidad de corrección juvenil del comienzo, que años más tarde parece estar abandonada, pero que pronto descubrimos que algo continúa habitando dentro de sus paredes. Desde aquí la película comienza a depender más de la atmósfera y de los jump scares baratos, ambos inefectivos en lograr su cometido. Al final termina siendo una historia de fantasmas y venganza que usa cada cliché del cine de horror con fantasmas que no asustan, uso de silencio para luego tratar de asustar con un ruido intenso que poco tienen que ver con lo que sucede y una trama blanda demasiado predecible. 

“Apparition” propone una premisa muy interesante, que termina desaprovechando por virtud de traer una historia genérica de esas que hay miles en el cine de horror. El apartado audiovisual está muy bien trabajado, pero no resalta gracias a la historia poco interesante, débiles actuaciones, por dejar fuera de pantalla todos los momentos de violencia y por presentar un final muy confuso. La astucia que presenta en el juego de palabras entre su nombre y uno de los elementos fundamentales en su trama no se traduce a la película, donde carece el suspenso y el enfoque.