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jueves, 3 de octubre de 2019

Reseña: The Curse of Buckout Road

Director: Matthew Currie Holmes
Guion: Shahin Chandrasoma y Matthew Currie Holmes
Año: 2019

Si una leyenda urbana no es suficiente para hacer tu película, tres es el número indicado. O al menos esto debieron pensar Shahin Chandrasoma (“Uncanny”) y Matthew Currie Holmes cuando escribieron el guion que se convertiría en el debut direccional de Matthew Currie Holmes. Brujas, albinos asesinos y espíritus se unen en esta enrevesada historia que tiene lugar en lo que es considerado uno de los lugares más embrujados de Estados Unidos.

“The Curse of Buckout Road” sigue a Aaron Powell cuando este regresa a la casa de su abuelo, el Dr. Powell, un reconocido psiquiatra. Su abuelo ha ganado interés en una serie de eventos que tienen lugar en Buckout Road, un área de donde sale el mito urbano de estar embrujada. Mientras el Dr. Powell investiga los sucesos recientes coincide con Cloe, una joven que cree estar maldita por este lugar y que se embarca junto a Aaron en búsqueda de la historia de Buckout Road con esperanzas de poder salvar su vida. 

Como parte de una clase universitaria Cloe (Dominique Provost-Chalkley; “Avengers: Age of Ultron”) estudia las leyendas urbanas de Westchester New York, y va a explorar el lugar donde todas estas convergen: Buckout Road. La historia que pone los cimientos para la fama de este lugar es la del matrimonio Buckout y el evento violento que tuvo lugar entre ellos y que produjo que el espíritu de la esposa se quedara rondando el lugar llevando a un mortal destino a quienes por allí merodean.

Tanto Cloe como unos gemelos compañeros de clase y Aaron (Evan Ross; “Hunger Games: Mocking Jay”) comienzan a tener sueños vívidos sobre estas leyendas una vez entran en contacto con el lugar. Estos sueños los adentran en estas leyendas, las cuales son presentadas por el director Matthew Currie Holmes como diferentes subgéneros del cine de horror. Mientras que la historia del matrimonio Buckout se presenta como una película de época, la de los gemelos albinos se presenta como un grindhouse slasher de los '70 y la de las brujas con un estilo folk horror. 

El uso de diferentes estilos para presentar las leyendas es uno estéticamente cautivador, pero que colateralmente acentúa la disparidad y la falta de conexión entre ellas. Este es un problema persistente en la película y que la hace incoherente e inconsistente. Por suerte las actuaciones de Provost-Chalkley y la limitada aparición de Danny Glover (“Lethal Weapon”), no tanto la de Ross, junto con los descubrimientos y giros pueden mantener la atención del espectador.

Al llegar al tramo final es cuando la película exhibe sus problemas para enlazar los eventos y pierde toda coherencia. Los momentos más interesantes tienen lugar en este tramo donde se explora a profundidad cada leyenda y su desenlace, pero más que una historia única se siente como una antología de horror. El final busca ser uno sorpresivo y divertido, pero termina ejemplificando la disparidad e incoherencia que se ha demostrado con las leyendas y, claramente, no tiene el efecto deseado.

“The Curse of Buckout Road” adentra al espectador en una serie de leyendas urbanas en el estado de New York en la que es considerada la calle más embrujada del país. Cada leyenda por separado es interesante y bien trabajada con un estilo único que demuestra la versatilidad y creatividad de Matthew Currie Holmes como director, pero tienen serios problemas en unir todas estas en una historia coherente. Presenta algunas cosas interesantes como el mencionado estilo visual de cada leyenda, pero falla en sumergir al espectador en la historia y en ser una aterradora.





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