Reseña: Itsy Bitsy

Director: Micah Gallo

Guion: Jason Alvino, Bryan Dick y Micah Gallo

Año: 2019

Sinopsis: Una enfermera con sus dos hijos se mudan al hogar de un anciano enfermo para cuidar de él. Una de las reliquias que el anciano colecciona contienen una antigua araña, la cual es liberada por error. Una vez libre, esta comienza a dejar un camino de víctimas mientras se alimenta, crece y se reproduce.

Las arañas son para muchos un animal temible. Sus movimientos sigilosos y el potente veneno que cargan algunas son material de pesadillas. Utilizando muy bien el nombre de esta fobia “Arachnophobia” es una de las películas que ha utilizado este común temor, con permiso de “Harry Potter and the Chamber of Secrets” y sus descomunales arañas gigantes lideradas por Aragog. En un lugar intermedio entre las arañas en “Arachnophobia” y “Harry Potter” encontramos a las de “Itsy Bitsy”.

En “Itsy Bitsy” una enfermera se muda a un pueblo rural junto a sus dos hijos donde consigue trabajo cuidando a un anciano. El anciano Walter, interpretado por Bruce Davison (“Insidious: The Last Key”) es un colector de reliquias y una de estas contienen una enorme araña dormida. Al romperse esta reliquia, la araña escapa y se refugia en la casa, donde encuentra el lugar ideal para reproducirse y causar pánico. El número de arañas aumenta rápidamente, al igual que el número de víctimas que dejan a su paso.

“Itsy Bitsy” maneja varias historias a la vez. En la principal de estas tenemos a Kara, interpretada por Elizabeth Roberts (“Criminal Minds”), quien lucha con el abuso de medicamentos opioides y con su maternidad al haber perdido un hijo y encontrarse sola criando otros dos. Los hijos Jesse (Arman Darbo; “And Then I Go”) y Cambria (Chloe Perrin; “Single Parents”) quedan al otro lado de la moneda, viendo como sus vidas continúan cuesta abajo, pero sin poder hacer mucho para mejorar su situación. Esta complicada red solo logra que Jesse, el mayor de los hermanos, asuma una actitud rebelde. 

Otra de las vertientes que trabaja es en la asociación de la araña con una deidad y la afinidad de esta por los niños. La película comienza con Akheeba (Treva Etienne; “Black Hawk Down”), un cazador de reliquias, mientras roba una reliquia de una tribu indígena. Esta tribu presuntamente envenenó a Maggie, la difunta esposa de Walter y quien fue como una madre para Akheeba, por lo que este buscaba venganza. Akheeba le obsequia la reliquia a Walter, pero en un impulso de ira la rompe, liberando sin saberlo a la peligrosa araña. 

En querer explorar la relación de Kara con sus hijos, su abuso de medicamentos, la relación de Walter con Akheeba, la leyenda del origen de la araña y los estragos que estas causa es donde falla “Itsy Bitsy”. El trabajar tantos temas a la vez hace que todos queden bastante subdesarrollados y que el espectador quede algo confundido tratando de ver hacia dónde se va a dirigir y algunas de estas tienen poca relevancia con la trama principal. Esto también limita el tiempo que se le puede dedicar a cada cosa, lo que a su vez afecta el tiempo de exposición a la araña.

Esta mezcla de temas no es el único de sus problemas, ya que el guion de Jason Alvino, Bryan Dick (“911 Nightmare’) y Micah Gallo también tiene algunos fallos de ritmo y malos diálogos. En partes de la impresión que se quieren acelerar algunos sucesos, lo que termina en escenas algo incómodas, trayendo diálogos y discusiones con poco o ningún desarrollo que lleve a estos. Por suerte el elenco hace un buen trabajo en las interpretaciones para darle mucho carisma a los personajes y ayuda a que el espectador pueda obviar estos defectos.

La realidad es que más que por los temas que pueda trabajar esta película, su mayor atractivo son las arañas. Aunque estas quedan algo subutilizadas, cuando aparecen lucen muy bien. Micah Gallo trae su conocimiento en efectos visuales desarrollado en otras películas de horror como “Frozen, “The Innkeepers” y “Hatchet” por mencionar solo algunas de su extensa lista, y lo aprovecha en su primer largometraje como director. Aún en las esporádicas escenas en las que se usa CGI, este luce bastante bien. 

“Itsy Bitsy” extiende sus ocho largas patas a tantos temas como puede, lo que termina complicando su red y frustrando su potencial. Pasa demasiado tiempo en el drama familiar, cuando es en el horror donde brilla. El no abusar de la apariencia de las arañas y siempre mantener un tono serio (algo no muy común en películas de este tipo de criaturas), ayuda a mantener la efectividad de estas y que sus apariciones representan siempre un peligro. Si eres de las personas que temen a las arañas y puedes sobreponerte a los problemas de estructura del guion, “Itsy Bitsy” te hará querer revisar cada esquina de tu casa al terminarla.