Reseña: Haunt

Director: Scott Beck y Brian Woods

Guion: Scott Beck y Brian Woods

Año: 2019

Las casas embrujadas son una de las actividades predilectas para los fanáticos del horror y los sustos para hacer durante la temporada de Halloween. Estas atracciones ofrecen una buena dosis de personajes y situaciones terroríficas a escasos centímetros de tu cuerpo, pero con un sentido de seguridad, que resulta de suma importancia para su disfrute. Pero ¿y si se elimina la parte de la seguridad? Pues esta es justo la premisa de la que parte “Haunt”. 

En “Haunt” un grupo de amigos va a una casa embrujada extrema para pasar un buen rato de sustos. Al principio todo parece demasiado siniestro, pero asumen que es parte de la experiencia y se adentran en la atracción. Una vez dentro, comienzan a pasar cosas que parecen excesivas para este tipo de atracciones y comienzan a sospechar una vez estas comienzan a aumentar su intensidad. Lo que sigue es una carrera en un laberinto por salvar sus vidas mientras son acosados por psicópatas enmascarados dispuestos a hacerles daño.

Scott Beck y Brian Woods, ambos responsables del éxito de 2018 “A Quiet Place”, traen esta historia que cumple con todos los requisitos de un slasher. Una vez el grupo de amigos entra en la casa no pasa mucho tiempo para que comiencen los sustos y que la sangre comience a correr. La primera muerte sirve tanto para poner en contexto a los amigos sobre cuán reales son los peligros que enfrentan y al espectador para saber qué esperar de estas escenas.

Dentro del equipo de productores de la película se encuentra Eli Roth, reconocido por su estilo de gore extremo en películas como “Hostel” y “The Green Inferno”, por lo que es de esperar algunas escenas de este tipo. Aunque no llegan a ese estilo exagerado, las escenas de gore son gráficas y muy bien realizadas, de esas que llevan a ponerse la mano en la boca y levantar las piernas para quedar casi en una posición fetal como solicitando protección maternal. 

Los más interesante de esta película son los villanos. Inicialmente estos aparecen con máscaras y atuendos muy apropiados para Halloween, lo cual de por si son tenebrosos. Una vez se revelan las caras de los villanos, estas tienen un efecto impactante muy superior al de sus máscaras y en vez de tenebrosos, son simplemente traídas directo de una pesadilla. Por el contrario, el grupo de jóvenes no es más que un conglomerado de personajes clichés de los cuales no recordaras sus nombres unos minutos luego de que la película termine. Ninguno de estos se desarrolla excepto por Harper (Katie Stevens; “Polaroid”) de la cual se muestra un poco de la relación abusiva que llevaba con su padre y como aún tienen problemas con el estrés postraumático, pero nada demasiado importante en la historia.

Justo esto de los clichés de las películas de horror es el principal problema de “Haunt”. Mientras que algunos sirven para generar la atmósfera tensa que predomina en toda su duración, muchos de estos le restan calidad. Algunos de los sustos o eventos importantes para mover la historia requieren que los personajes estén perfectamente colocados en un lugar o escenario, lo que le resta credibilidad. Este problema también hace que el espectador que tenga algo de experiencia con el cine de horror pueda anticipar mucho de lo que va a ocurrir.

Aunque muy lejos de la calidad de “A Quiet Place”, Scott Beck y Brian Woods vuelven a traer una muy buena película de horror, poniendo sus nombres en el radar de los fanáticos de este género. Presentan unos villanos originales dentro de una historia que hemos visto antes, pero que aporta cosas nuevas e interesantes para mantener al espectador con la vista fija en la pantalla hasta que aparezca alguna escena de gore, en la cuales muchos no podrán evitar mirar a otro lado. Al igual que “Candy Corn” es otro título de horror que se estrena este año y que va directo a la lista de favoritas para ver durante la temporada de Halloween.