Reseña: Don't Look

Director: Luciana Faulhaber

Guion: Jessica Boucher

Año: 2019

Sinopsis: Cinco amigos de New York City deciden dejar la ciudad e irse de vacaciones al campo, pero pronto se ven acosados por un psicópata asesino que puede tener alguna conexión con el grupo.

“Don’t Look” es una pequeña producción de la novata directora Luciana Faulhaber distribuida por Wild Eye Releasing. Faulhaber también protagoniza la película, que nos trae una historia que sigue la fórmula de los slashers de la década de los 80. Junto a Faulhaber, Jeff Berg (“House of Demons”), Hailey Heisick (“Diamonds to Dust”) y Javier Gómez completan el resto del elenco protagonista.

En “Don’t Look” un grupo de jóvenes deciden ir a la cabaña de la familia de Lorena, interpretada por Faulhaber, donde un atroz evento tuvo lugar y que curiosamente nadie en el grupo sabía sobre él. Este evento se presenta en la escena de apertura, donde vemos a Lorena de niña presenciando la muerte de su madre, la cual parece haber sido provocada por su padre. De regreso al presente, los jóvenes deciden usar este lugar para fiestar, pero no sabían que allí vivía una extraña pareja de campesinos.

Una vez aparecen estos campesinos, la película toma un giro hacia lo extraño. Aquí también comienzan los guiños a slashers clásicos, el más prominente siendo “The Texas Chainsaw Massacre”, aunque tengo mis problemas clasificándola como un slasher, pero esto es un tema para otro momento. La clásica sierra de manos tiene buena participación y es parte de una de las sangrientas muertes, cuya entrega se ve algo afectada por el limitado presupuesto. Otra escena que envuelve un gancho de carnes sirve como claro homenaje a esta película.

Como mencionado, “Don’t Look” sigue la fórmula slasher. Un grupo de jóvenes de fiesta son acosados por un misterioso asesino y uno a uno asesinados. Como en los clásicos, tenemos a la pareja caliente quienes son entorpecidos por un asesino dispuesto a evitar que estos pasen un buen rato, un desarrollo de personajes vago que solo sirve para tener un número de víctimas y algo de imaginación para presentar las muertes.

El guion de la película, creado por Jessica Boucher, aunque trabaja una idea simple, pudo haber sido pulido mucho más. En cualquier slasher las muertes son lo más importante y el resto de la película solo sirve para llevar a estos momentos, pero hay demasiados agujeros en la historia de Boucher. De igual forma, en su idea de hacer ver a las mujeres como poco vulnerables, se va al otro extremo, dándoles una resistencia que por partes parece irreal.

“Don’t Look” me parece más del tipo de películas que sirve para exponer el talento del elenco y del equipo de producción que una película que busque ser única dentro del género del horror. La historia es simple y nunca busca salir de la fórmula que hemos visto tantas veces y visualmente tampoco busca impresionar. No es una mala película, pero tampoco trae nada novedoso y al final terminas sintiéndote indiferente.