Guion: Matthew Butler-Hart y Tori Butler-Hart
Año: 2019
El folk horror sigue moviéndose con paso firme en el cine de horror. Ya le había dedicado un poco de tiempo a hablar del resurgir del folk horror en mi reseña de “Apostle” y como en los últimos años hemos tenido muy buenas películas que caen de lleno en este género o que toman elementos de este. “The Isle”, aunque en mi criterio no es una película de folk horror, es claro que se alimenta de muchos aspectos de este.
“The Isle” tiene lugar en 1846 cuando un bote mercantil se hunde y tres sobrevivientes logran llegar hasta una pequeña isla. En esta isla solo residen cuatro personas, todos misteriosos y evitando ayudar a los marineros a llegar al continente. Luego de investigar la isla descubren que cada año cerca de la misma fecha ocurre una tragedia en el mar donde hombres jóvenes terminan pereciendo en la isla. Poco a poco descubren que esta isla está embrujada por el fantasma de una sirena, lo cual los lleva a descubrir los secretos de esta isla e intentar escapar de ella.
Desde el comienzo de “The Isle” queda explícito que uno de sus puntos más fuertes será la fotografía. La isla escocesa Eilean Shona donde fue filmada, provee un fondo espectacular que le da mucho valor artístico a las tomas, al igual que provee un aura misteriosa para apoyar el suspenso de la idea principal. En todas las escenas se busca exaltar esto visuales y logran que esto sea uno de los puntos más atractivos de la película. Al momento de ir a la historia que tendrá lugar aquí el resultado es todo lo contrario. Deciden irse por una construcción lenta de la trama, lo cual nunca llega a tener una recompensa justa para el espectador. Aparte de esto, los sucesos que ocurren durante esta construcción no llegan a incomodar demasiado ni a ser lo suficientemente interesantes, lo cual lleva a que todo este proceso sea aburrido. Solo la fotografía y la esperanza de que algo suceda puede mantener la atención del espectador.
De inicio la historia me pareció interesante. La película comienza sin dar muchos detalles de lo que ocurre en la isla y el espectador debe seguir la historia de los tres marineros para poder entenderlo. Una vez se empiezan a revelar detalles de la trama cada vez me interesaba menos la historia. En el proceso narrativo deciden tomar la vía de la construcción lenta, lo cual pone mucho peso de los sucesos en el guion y en las actuaciones. Mientras que las actuaciones son buenas y los personajes están bien definidos, ninguno llegó a ser lo suficientemente interesante como para ayudar a adentrarme en la historia, un problema más de narrativa y no del elenco. El grupo de actores formados por Conleth Hill (“Game of Thrones”), Alex Hassell (“Cold Mountain”), Tori Butler-Hart (“Two Down”) y Fisayo Akinade (“The Girl With All The Gifts”), entre otros, realizan un muy buen trabajo y consiguen representar personajes convincentes. La mejor parte del elenco son las mujeres, pero tienen poco tiempo en escena. Quizás es algo a propósito para apoyar algunas ideas de la trama, pero me pareció que se subutiliza este talento.
Los mayores problemas de esta película recaen principalmente en el guion y en decisiones del director. En esta historia trabajada por el matrimonio de Matthew y Tori Butler-Hart se busca que el suspenso sea su mejor aliado, y esto lo consigue en cierta forma. Una vez transcurren los minutos, el desarrollo es tan lento que llega a desesperar y las pocas cosas que suceden para impulsar la historia terminan por perder importancia. Durante gran parte de la película coquetean con elementos de horror, pero al momento de hacer buen uso de estos, salvo por algunos jump scares efectivos y bien colocados, no acaba por satisfacer. A esto se el suma unas ideas algo extrañas al momento de editar, como usar retrospecciones en momentos donde rompe completamente con el flujo de la trama, aunque sirvan para revelar detalles importantes de esta.
“The Isle”, salvo por la fotografía y actuaciones, se siente como naufragar en una isla desierta, donde tienes la esperanza de que algo ocurra que cambie tu destino, pero no llega a ocurrir. Esto es justo lo que pasa con la historia, quedas durante toda su duración esperando que algo suceda y cuando por fin ocurre no es suficiente para salvarla. Mientras que intentan usar el suspenso como su aliado, esto termina jugándole en contra, ya que, al dedicar tanto tiempo a desarrollarlo, la trama se mueve demasiado lenta y crea muchas expectativas en el desenlace, que termina no cumpliéndolas. “The Isle” definitivamente no estará en la lista de ejemplos para exaltar el folk horror ni sus elementos.
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